10 libretas, 7 años, 5 países, 2 protagonistas… ¡Y 1 momento indescriptible!
En un largo pasillo de una empresa internacional donde cada día coincidía con directivos, decidí vivir un día diferente. Muy diferente. De repente, vi salir a un crío del despacho general gritando: “¡Eres Gemma!” Y sonriendo afirme con la cabeza mientras respondía: “Sííííí”. Entonces, vino corriendo hacia mí, riendo y gritando mi nombre. Se paró delante mío. Me miró a los ojos. Me agaché.